Recolector

Tanto había luchado yo por no enredarme en las amalgamas medúseas de los signos, ni sucumbir ante el peso del cuerpo de sentidos abismantes. Pero como uno más de los recolectores de existencias, me vi en la obligación de adquirir el caracter, dejarme ablandar por la verborrea de significaciones que son como la tumba-corsé para las ansias primaverales. Bien encausadas, bien contenidas, como ojos zurcidos de imbunche tecnólogico, como ciego que quiere ver, pero ve el prisma sofocante de la razón hecha mandamientos.

Constreñido por la locura de una realidad recolectora.